Querido enemigo...







Cuenta una antigua fábula india que había un ratón que estaba siempre angustiado, porque tenía miedo al gato. Un mago se compadeció de él y lo convirtió… en un gato. Pero entonces empezó a sentir miedo del perro. De modo que el mago lo convirtió en perro. Luego empezó a sentir miedo de la pantera, y el mago lo convirtió en pantera. Con lo cual comenzó a temer al cazador. Llegado a este punto, el mago se dio por vencido y volvió a convertirlo en ratón, diciéndole: “Nada de lo que haga por ti va a servirte de ayuda, porque siempre tendrás el corazón de un ratón”. 

 Querido enemigo,

    Siempre he querido escribirte una carta, y hoy vengo a reconciliarme contigo; a explicarte con esta fábula  quién eres y a demostrarte con ella que es tu actitud ante la vida la que tienes que cambiar y no la mía. Que eres tú el que tiene que abrir los ojos y destapar sus esperanzas para vivir por ellas y así no fijarte tanto en las mías... Enemigo mío, lo que tienes es miedo de vivir tu vida y de equivocarte como me equivoco yo; por eso te disgustas tanto cuando ves que sobrevivo con alegría, a pesar de las dificultades.

SOSIÉGATE ENEMIGO MÍO, QUE YO NO SOY EL MOTIVO DE TUS DECEPCIONES; PORQUE AL QUE TIENE ALMA DE RATÓN, NADA LE QUITA EL MIEDO.


    Así que lo más que puedo hacer por ti, enemigo,  es ser tu amigo, y te daré un masaje en el alma... que te conmueva un poquito. Que te quite esa contractura que tienes, que te provoca pesares, desesperanzas y miedos, que seguro que aliviarían con un poco de ternura, paciencia e indulgencia. 

    Y con confianza te demostraré,  que  tú no eres mejor que yo,  ni yo mejor que tú, aunque por supuesto seguramente que te distingues de mí en más de un millón de virtudes que no conozco, y yo a ti en otro millón que no conoces... Porque los dos tenemos nuestra propia versión de la verdad y los dos pensamos que la nuestra es la correcta.

    Pero me muero por decirte que soy como tú, que  me duele cuando me hieren, y me agrada cuando me quieren. Sufro con el rechazo y disfruto cuando me aceptan...


     Y por eso dime, ¿qué esperas de mí?, ¿qué es lo que tienes contra mí?  Si algo te importunó de mi, olvida lo que pasó, porque lamentarte u odiarme no va  a rehacer el pasado... Y la idea tan frívola que de mí tienes no te hará más fuerte ni mejor persona, sin embargo a mí si  que me duele; no el que no me quieras, sino el que quieras hacerme daño sin conocerme. Demasiadas expectativas para alguien, querido enemigo, a quién no conoces, ¿no crees? Porque creo que no me conoces bien...


    Así , que ven y dímelo , habla conmigo y cuéntame qué es lo que te he hecho, hazlo y así archivarás los malos recuerdos, dándome oportunidad de repararlo.

  •  Te quitaré si me dejas, esas ideas arrugadas que de mí tienes dentro de tu cabeza y te haré un "lifting cerebral" para que no seas tan exigente, rebuscado y crítico conmigo.  Para que no me analices, descanses de mí y me dejes ser como soy. Para que intentes no buscar los motivos que me llevan a mí a hacer las cosas y para que ocupes tus horas en buscar el motivo que te lleva a ti a interesarte por las mías...

  •  Ábrele una ventana a tu conciencia para que respires aire fresco por ella... Asómate y comprueba que todos somos iguales y que todos somos malabaristas de la vida  en este mundo,  intentando hacer equilibrio para no caer y  si me empujas, probablemente en el mismo movimiento caigamos los dos. Así que limpia el vaso en el que vas a beber, antes de decirme que el mío está sucio. Seguramente, cuando vea limpiar el tuyo, repararé en que el mío también lo está. Así aprenderé de ti.


     Porque no voy a cambiar, ni creo que deba hacerlo porque no te guste que me encuentre cómoda y reconciliada con todo lo malo y lo bueno que tengo; con mis dificultades y mis elecciones, acertadas o no. Así que no empañes la vista del que ve algo bueno en mí, porque igual no soy lo que yo creo ser;  pero te aseguro que tampoco soy  lo que tú crees... Porque todo el mundo tiene el derecho a  ser, o intentar llegar a ser, lo que cree  y nadie necesita  de "abruptos espejos", que muestren imágenes  de nosotros mismos, desvirtuadas  por la opinión de quien no nos quiere, nos quiere mal, o nos quiere menos...


      Y no estoy loca; no. Porque el que  no piense como tu crees que debo, no me hace peor. ¡Quiero ser así! Vivir con ganas, ser intensa, contradictoria, transparente , asombrable y extremadamente confiada... exponiéndome así a que me hieras tú y quien quiera herirme. Porque confiar ciegamente no es irracional ni despreciable. Porque sé que al desnudarme,  te doy opción de que opines sobre mi; pero mi condición me lleva a no pensar mal de ti, y a pensar que no pensarás mal de mí. 


    Podrás hacerme daño,  pero ese optimismo que tanto te molesta, -PORQUE NO COMPRENDES-, me hace levantarme y seguir adelante, dándome el gustazo de no odiarte; porque mi felicidad es gratis y mis pensamientos libres... Porque sí, todos somos libres; pero no uses tu libertad para hacerme daño. Y tu incomprensión, que tiene la misma medida de tu miedo; me hace más fuerte, porque me distingue de ti y me alivia el alma...



     Y recuerda que todo ese daño que para mi deseas, se hará siempre extensible al resto de mi mundo, porque si tiras piedras a mi árbol, no sólo alcanzarás a mi tronco; también alcanzarás mis frutos... Pero recuerda que de  las semillas de esos frutos que caes nacerán otros árboles, muchísimo más fuertes.


       Así que déjame que mis oídos perciban sólo lo sutil de lo que me dices, y me quede sorda ante cualquier susurro o murmuración negativa; para que siga siendo una ilusa e ignorante feliz.

     Déjame vivir mi vida como yo quiero, con mis ideales y sueños  que te parecen absurdos, y mis propias razones para vivir mi vida intensamente; una vida que valoro y siento con todas mis fuerzas , eligiendo yo sola mi propio camino, mis  propias pasiones y mis propios compromisos.

Porque tengo que decirte que :

  • Seré yo la que me avergüence de mis errores y mis defectos, y seré yo la que me sienta más o menos orgullosa de mis aciertos y virtudes.
  • Seré yo la única minera de mí misma , puliendo con pico y pala  mis defectos.
  • Seré yo la que se auto limite y aprenda a vivir con rectitud, aunque todos los días tenga que enderezarme y me obligue a no extralimitarme.
  • Seré yo la que decida cuanto me  sobra de orgullo y cuanto me falta de razón.
  • Seré yo la que decida  no decirte lo que no debo, si supongo  que te va a disgustar, a no ser que sepa que decírtelo te hará bien y sacarás provecho… ¡Y si te lo digo alguna vez! Te aseguro que intentaré amortiguar el impacto del desagrado… Te lo prometo.
  • Seré yo la que no te exija nunca nada;  y mucho menos lo que yo no he sido capaz de conseguir todavía.


    Porque soy el conjunto de todas mis equivocaciones  asumidas y escrupulosamente diseccionadas para sacar lo menos malo de ellas; pero afortunadamente no soy el conjunto del lo que tú piensas de mí… porque mis momentos buenos y malos, mis experiencias vividas y sobrevividas, mis risas y mis llantos, mis defectos y virtudes…  son  SOLAMENTE míos; tienen derechos de autor, y ese autor soy YO.

     Así que "alma de ratón"; quiero que sepas que dentro de CADA CORAZÓN siempre hay alguien que está en contra de nosotros ; y creo que la batalla que más debes temer y que no tendrás más remedio que librar,  es la de enfrentarte contigo mismo y con  tus propios miedos; que yo ya me enfrentaré con los míos.

        PORQUE YO NO SOY TU PEOR ENEMIGO; LO ERES TÚ MISMO.











 



    

0 comentarios:

Publicar un comentario