CUMPLES 14 AÑOS: SONRÍE FELIZ

    




Hoy te voy a hablar de tu sonrisa.

    Esa preciosa sonrisa que tanto te empeñas en esconder… 

     No lo hagas. Intenta no hacerlo: esa ancha sonrisa -que supongo que contienes por “miedo” a exponerte- viene aún de sentimientos que albergas TODAVÍA PUROS.

  • Porque eres joven e inocente, y tus ganas de vivir lo deben ser también; así que  pierde el miedo a ser tu mismo.

  • Porque  tienes toda tu vida por delante.

  • Porque  eres un libro apasionante  por escribir; y  sé que lo escribirás con la letra que tú decidas. Con tus propios puntos y seguidos y tus propios puntos y apartes. Con tu particular sentido común marcado por ese sentido de lo “justo” que siempre has tenido y te ha hecho siempre ser tan soberbio...


    Pero sonríe… Deja escapar esa sonrisa que tanto te cuesta mostrar , y que yo tanto celebro ver cuando olvidas contenerla. Esas pocas veces en las que estás relajado y confiado y no te preocupas porque  yo vea si estás feliz o contento.

   Como si el sonreír desnudara tus ideas, y dejándote expuesto a algo malo. No hay nada malo… lo malo es contenerla.

    Te  voy a contar una historia que guardo ahí dentro, por algún rincón de mi corazoncito para que entiendas el valor que le doy a algo que te puede parecer tan tonto :

    Hace muchos años cuando yo era más pequeña que tú, contaba en mi vida con una persona encantadoramente risueña, cuya sonrisa se esforzaba  constantemente en buscar la mía.

    Esa persona tenía tu edad justo; una persona importante en mi vida… alegre y feliz como la que más. Sin mayores problemas  que el de seguir provocando sonrisas con la suya; haciendo siempre gala de un espíritu lleno de vida.

    Sus ojos brillaban al sonreír y su sonrisa era tan ancha y enriquecedora; que no tenías más remedio que responder enganchada con una sonrisa de iguales medidas.

Tanto buscó la mía, que me enseñó a sonreír sin miedo.

    Pero un buen día se acabó. Se despertó sin ganas de sonreír Sin ganas de sonreírme. Algo pasó; algo pensó; que aún a día de hoy, tan  solo saben él y su sonrisa...  Esa sonrisa que a partir de entonces guardó para él , y para su celosa soledad - de  ideas  y pensamientos-, no sé si “escogida” o “impuesta” por alguna conclusión dañina qué le provocó  un apagón moral en su vida , que le ha acompañado toda su vida a partir de entonces. Sin dejar entrar a nadie más.

     Qué fue, qué pensó, qué escuchó, qué creyó…  Qué fue lo que se quedó con sus ganas de iluminar con su sonrisa, para caer en la oscuridad de la soledad y la desesperanza. Qué interruptor dejó de funcionar…

      El caso es que ese día se convirtió en otra persona . Una persona cuya incapacidad de experimentar alegría me colocó -nos colocó-,  a  kilómetros y kilómetros  de distancia. Una persona que a partir de entonces viviría de huecos y vacíos. Vacíos de preguntas sin respuesta , llenos de dudas y de desgana.

OJOS SIN LUZ. De una vida que deja de tener grandes propósitos…

Y esa falta de luz se catalogó como enfermedad. Y su falta de sonrisa se catalogó como desesperanza. Y sus dudas , sus historias , sus recuerdos y sus sueños,  se fueron disipando entre tanto diagnóstico  y  tanta  inútil pastilla. Siendo su silencio su mayor coraza de protección; aislándose moralmente. Cambiando el “ser” por el simplemente “estar”. Quedándose su ilusión aparcada en la de aquel niño de 14 años que  me dejó de sonreír…

ENFERMANDO DE DESILUSIÓN Y DE DESGANA


     Por eso hoy, día de tu 14  cumpleaños; quiero dejarte por escrito  – que sé que es como mejor me atiendes; sin interrupciones­- que quizás no sea la madre que esperabas que fuera, y que igual podría ser más paciente y ejemplar , pero muchas veces pierdo las formas ,  por miedo a que tu también dejes de sonreír… ME ANGUSTIO TANTO que no tengo más remedio que hacer todo lo que esté en mi mano, para que dejes siempre lucir esa sonrisa tan bonita en tu cara.

     Así que te pido con todo mi corazón, que cuando dudes si sonreír o no : Pares , respires profundamente… y pienses: UNOS POCOS DÍAS MALOS REPARTIDOS A LO LARGO DE TODA TU VIDA NO DETERMINAN QUE LA VIDA SEA UN MAL LUGAR DONDE VIVIR. Recuerda siempre cuando alguien o algo amenace tus ganas (incluida yo): 

QUE LA VIDA ES DEMASIADO CORTA PARA DESPERDICIARLA SIN SONRISAS
Porque dan luz a tus ojos. Y esa luz a mi me da la vida; porque como ya te he dicho otras veces…

NECESITO TU SONRISA PARA SONREÍR.

P.D.: Espero  que te guste mi regalo- aparte de las magdalenas de chocolate de las monjitas , tu camisa “de mayor” para que yo te vea guapo y la guerra de cupcakes con tus primos-  FELIZ CUMPLEAÑOS

P.D.2: ¿SORPRENDIDO?

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